Por Jeremy Anagnos, gestor de cartera de la estrategia Global Sustainable Listed Real Assets de Nordea

El universo de activos reales que cotizan en bolsa, un mercado de 8.000 millones de dólares1 , está en una posición única para liderar y beneficiarse de las iniciativas de sostenibilidad globales.

La infraestructura y los bienes raíces están a la vanguardia de las acciones para alcanzar las cero emisiones netas a través de la instalación de paneles solares, la mejora de las líneas de transmisión y la mejora de la eficiencia energética de los edificios. Las empresas de suministros públicos globales están presionando para cerrar la generación basada en combustibles fósiles y actualizar los sistemas de agua, mientras que en las comunicaciones y el transporte, las empresas están habilitando el teletrabajo, optimizando la logística y reduciendo la congestión.

Las empresas que podemos encontrar en el mercado de valores albergan la gran mayoría de los principales proyectos inmobiliarios. Afectan a casi todos los sectores de la economía porque repercuten a instalaciones esenciales y a servicios vitales. Por tanto, se podría decir que los activos reales cotizados están bien posicionados para contribuir a los objetivos de sostenibilidad.

En conjunto, las industrias en activos reales están liderando casi tres cuartas partes de la inversión para apoyar la descarbonización, mejorar la eficiencia energética y promover el crecimiento económico con una menor huella de carbono. Los activos reales globales también pueden tener un impacto tremendo desde una perspectiva social, impactando la salud de la población, el empleo y la calidad de vida.

Consideraciones ESG especializadas

Las empresas de activos reales son compañías con ciertas peculiaridades e informes de datos particularmente distintos en comparación con las acciones generales. Por ejemplo, un promotor inmobiliario puede dar información acerca de su tasa de certificación de edificios verdes, mientras que una compañía global de suministros públicos puede informar de la capacidad renovable que ofrece un territorio o de sus objetivos de intensidad de carbono.

Desde una perspectiva de sostenibilidad social, se evalúa cómo empresa está alineada a determinados los objetivos de desarrollo de las Naciones Unidas, tales como “Ciudades y comunidades sostenibles” o “Agua limpia y saneamiento” en función de qué se está considerando.

Cuando se trata de estandarizar las calificaciones ESG en diferentes sectores y empresas, las calificaciones ESG de terceros suelen ser de poca ayuda, especialmente en activos reales. Entre las diferentes agencias de calificación ESG, existe un gran desacuerdo sobre cómo una empresa específica puede puntuar. Las correlaciones entre las principales agencias, como MSCI, S&P, Sustainalytics, CDP, ISS y Bloomberg van desde 0,3 hasta 0,7, mientras que las principales agencias de calificación de deuda muestran correlaciones de calificación de más de 0,95.

Las agencias de calificación ESG de terceros también dependen de los informes de las empresas en las que se basan las calificaciones: La información «sí/no» sobre una determinada política social puede conducir a altas puntuaciones sociales, sin haber realizado ningún análisis sobre el nivel de esas políticas sociales o los resultados reales alcanzados. Las calificaciones de terceros y un enfoque ESG generalista tienen el riesgo de ecarecer de experiencia en activos reales y tienden a priorizar la información de un tiempo anterior, lo que puede ser engañoso. Por ejemplo, si una empresa de servicios públicos designa a un nuevo director que resulta ser un candidato interno bien entrado en la materia, podría pasarse por alto un cambio significativo que podría influir positivamente en el buen funcionamiento de la empresa. Un factor que alude directamente al buen gobierno de una empresa.

Optimismo por el compromiso climático

La colaboración de los inversores se centra hoy en día en las cero emisiones netas y la sostenibilidad ambiental como punto de partida, dado el enorme impacto que los activos reales pueden tener en la lucha contra el cambio climático. Para obtener más información sobre los compromisos reales que las empresas tienen en torno a las cero emisones netas, CBRE, gestor de la estrategia Global Sustainable Listed Real Assets de Nordea, ha realizado recientemente un estudio sobre las políticas de cero emisiones neto y los objetivos de reducción de emisiones en todo el universo de inversión que cotiza en bolsa . Nos centramos en las empresas que también reportaron emisiones de Alcance 1 y Alcance 2 con el fin de comprender mejor el impacto potencial de las políticas de la empresa en la mitigación del riesgo climático.

Dentro del universo de activos reales que cotizan en bolsa, las empresas que reportan datos de alcance 1 y 2 tienen una capitalización total en el mercado de 5 billones de dólares. Estas empresas generan entre el 5 y el 10 % del total de las emisiones mundiales y entre el 10 y el 15 % de las emisiones derivadas de todos los activos reales. Por lo tanto, las empresas de activos reales que cotizan en bolsa tienen una oportunidad significativa de influir en las fuerzas del calentamiento global y el cambio climático.

Hemos encontrado algunos datos interesantes. De las empresas que informan sobre las emisiones de alcance 1 y 2, casi el 70 % tienen objetivos internos de reducir sus emisiones o alcanzar el cero neto. Alrededor del 40 % de estas empresas que informan sobre las emisiones tienen objetivos de cero emisiones netas, y un tercio pretenden alcanzarlo para 2030 o antes. Estas compañías de activos reales podrían influir enormemente en los objetivos de cero emisiones netas a nivel mundial puesto que son capaces de eliminar o compensar más de 1,2 gigatoneladas de carbono a lo largo del tiempo.

En resumen, vemos cómo los objetivos de reducción de emisiones se podrían acelerar con el claro impacto que las empresas cotizadas de activos reales pueden suponer para el medio ambiente. A medida que avanzamos hacia la consecución de los objetivos sostenibles, solo podemos esperar que exista una creciente demanda de este tipo de activos y que la investigación ESG sobre ellos continúe. Si considerar el futuro de la inversión sostenible, los próximos años parecen mostrar un futuro prometedor en esta calase de activos.

1 Gestión de Inversiones CBRE, Compromisos Reales e Impacto Real: Activos reales cotizados en el camino hacia el cero neto, 12,2022
2Gestión de Inversiones CBRE, Compromisos Reales e Impacto Real: Activos reales cotizados en el camino hacia el cero neto, 12,2022